La Diabetes es una enfermedad crónico degenerativa que se caracteriza por cifras elevadas de azúcar en sangre.
Todos seguramente hemos escuchado que a una persona le dio diabetes por un susto; ¿Qué tanto hay de cierto en esto?
Primeramente vamos a recordar que dentro de la clasificación de la diabetes, tenemos principalmente, la tipo 1 y la tipo 2, en la primera el páncreas no produce o la producción de insulina es mínima, por lo que siempre deberá ser tratada con insulina y la tipo 2, que aparece en edad adulta, en la que el tratamiento puede ser con tabletas y/o insulina pues aún se cuenta con suficiente producción de insulina en mayor número de casos.
Cabe señalar que en la actualidad se reconocen otros tipos de diabetes en su clasificación.
Cuando hacemos referencia a la tipo 1, que aparece en edades tempranas de la vida, se considera que es causada por una reacción autoinmune, es decir el cuerpo se ataca a si mismo erróneamente, lo que destruye las células del páncreas que producen la insulina, esto secundario a factores ambientales, aunque se reconoce un aumento de la probabilidad de padecer diabetes tipo 1 si hay un familiar con este tipo de alteración.
En el caso de la diabetes tipo 2 se plantea que las personas con un padre diabético tienen alrededor de un 40% de probabilidad de desarrollar diabetes lo que se eleva hasta un 70% de riesgo si ambos padres padecen la enfermedad. Lo que habla a favor de un factor hereditario que tiene más peso que en la diabetes tipo 1.
En resumen podemos decir que la diabetes como enfermedad no es hereditaria, más bien se hereda la predisposición genética a padecer la enfermedad que ante la presencia de factores ambientales como un estilo de vida inadecuado, enfermedades de tipo viral o eventos vitales, por ejemplo un suceso estresante, pueden llegar a provocar el daño celular suficiente como para que se desarrolle la enfermedad.
La buena noticia es que aunque no podemos corregir las alteraciones genéticas que actúan a favor de la diabetes, si podemos influir activamente en los factores ambientales para disminuir el riesgo y complicaciones de la enfermedad una vez instaurada.
Si presentas factores de riesgo, recuerda que la prevención siempre será el mejor tratamiento.
Dra Sol Márquez Landestoy
Centro Cubano de Atención al Diabético.
